Eleafar Cananita El Magi saltó de alegría al ver a Refeliel y le dijo el secreto. Aquella tarde la felicidad estaba en Bar Quimera, mientras el líder de los cananitas bailaba y el caminante Refeliel entraba a la sala de cine y veìa aquel film donde era un pirata, extraño personaje de los tiempos extinguidos.
Acerca del Segundo Gran Vitrolio, hay que decirlo, el artìfice de ese esplendente período de fiestas al aire libre y películas en celuloides gigantes, era Eleafar, y esa certeza emocionó a Refeliel quien se decía una y otra vez: "mi nena conocerá a este joven sabio y aprenderá sobre el arte de la alquimia..."
Entretanto el Bar quimera resplandecía como un espacio de ideasmariposas y estrategias del pensamiento creativo. Era como un sueño o era el sueño.
Un bar, una sala de cine y el tiempo en un solo espacio: Refeliel era feliz.